La Granja +Vicente Prats

Sábado 19 de junio. Sala El Loco, Valencia.

Lo que parecía una noche no apta para aquellos que no sucumben ante la melancolía y los estribillos redondos, se convirtió en uno de los mejores eventos musicales de la temporada. La Granja disipó las dudas acerca de su estado de forma actual haciendo una soberbia demostración de facultades e invitando a las discográficas a que corran a asegurarse la publicación de su próximo, y parece que ya perfilado, trabajo de estudio (el octavo concretamente).

Pero antes de los mallorquines tuvimos el honor de presenciar la segunda actuación en directo del más que prometedor grupo local Vicente Prats, que son un sexteto que se embarcó en esto de la música para arropar a la voz principal, la de ese geniecillo que da nombre al grupo, en un proyecto con los mimbres necesarios para alcanzar un espacio importante dentro del panorama de la música pop de cierto aire sixties.

Como en toda banda novel que se precie, Vicente Prats deja escapar en sus canciones multitud de guiños reverenciales de sus referentes principales. Su grupo preferido es, sin duda, Teenage Fanclub, y se notó. Sin embargo, la actuación de Vicente Prats enganchó a todo el publico que acudió a El Loco a disfrutar con La Granja -su guitarrista aseguró que eran "el grupo de su vida"- y que se llevó este más que agradable entremés como suculenta propina. Las canciones de su set recordaban también a Octubre o a Los Ángeles con esos coros y armonías tan bien logrados. Se atrevieron a versionar a Gigolo Aunts ("Where I find my heaven") y, como no, a los propios Teenage Fanclub ("the Concept"). Nos dejaron una gran impresión, les seguiremos de cerca.

Pasada la medianoche salia al escenario La Granja con Guillermo al frente luciendo una camiseta de T-Rex y con ganas de hacer que el respetable disfrutara de su directo. Y vaya si lo consiguieron. Con un setlist centrado en sus primeros discos, apenas se acordaron de los dos últimos -bueno, de "Eto'o" sí-, nos recordaron a todos lo que fueron, la importancia de un grupo que, junto a Surfin' Bichos, salvó a este país del tedio mas absoluto en esa difícil época posterior a la movida y previa al advenimiento indie.

Con canciones como "Persiguiendo una luz", "Y si al menos", "Los chicos quieren diversión", "Fuimos chicos rebeldes" o "Magia en tus ojos" nadie duda que tienen su lugar en la historia del pop patrio asegurado para la posteridad, y más si las interpretan con esa seguridad y contundencia como lo hicieron el pasado sábado, con una actuación de cerca de hora y media -doble bis incluído-. Una velada estupenda.

La noche continuó discurriendo placenteramente entre la sesión powerpopera de El Loco -ojo a la programación que se avecina en esta sala-, la ruta valenciana mas autóctona y el alivio de sabernos todavia de segunda.

Yo ya te lo dije