lunes, 26 de septiembre de 2011

Barrence Whitfield & The Savages

Sala Wah Wah, Valencia, viernes 23 de septiembre de 2011.



“Aristocracia Salvaje”


El regreso, tanto discográfico como sobre las tablas, de Barrence Whitfield & The Savages es una de las grandes noticias musicales de este 2011. En Valencia, sexta parada de la gira hispana que sirve como presentación de “Savage Kings” (Munster Records, MR306), Barrence Whitfield llegó, vio y predicó. Predicó ese credo cargado de Rock and Roll, Rythm & Blues y Soul rotundo desplegando así sus credenciales para que consideremos el suyo como uno de los grandes conciertos del año en curso.


Nacido Barry White, Whitfield cambió su nombre artístico para no ser confundido con su archiconocido tocayo y el viernes demostró que poco o nada tiene que envidiar al gran pope del Soul seductor.


Los salvajes que acompañan a Barrence actualmente son el guitarrista Peter Greenberg (miembro también de bandas legendarias como DMZ y The Lyres) y Phil Lenker al bajo, ambos integrantes de la formación original, además del sensacional Tom Quartulli al saxo y Andy Jody tras la batería.


Whitfield, que aguantó el tipo y no se deshizo en ningún momento de su chaqueta pese a lo caldeado que consiguió elevar el ambiente, interactuó en todo momento con un público que, si bien no llenaba la sala, sí cayó rendido ante el torrente rítmico y la entrega del combo liderado por el de Florida que alternó canciones de su último trabajo (incluida “Bad Girl”, de Lee Moses) con otras de los tiempos gloriosos, además de ese canto reverencial al gran jefe indio titulado “Geronimo’s Rock”.

Los Barrence Whitfield & The Savages del 2011 suenan contundentes y engrasados y Barrence, pese a parecerse cada día más a Carl Winslow, sigue suponiendo ese quimérico cruce entre Little Richard y The Sonics, de hecho, ninguno de los presentes podrá negarme que mientras sonaba ese trallazo que es “Willie Meehan” parecía que iba a mutar en “Strychnine” en cualquier momento.



El quinteto se sintió sumamente a gusto sobre el escenario y aseguraron que el español es un público sensacional (vale, eso se lo dirán a todos). Tal vez por ello que no se resistieron a las súplicas del mismo y regresaron hasta dos veces para terminar resolviendo la noche con el clásico “Rocking in the Coconut Top”, agradeciendo así al respetable haber sido testigo de otra experiencia religiosa.


Hubo muchos ilustres de la escena valenciana que no se quisieron perder esta consagración de los valores eternos del Rock y así pudimos ver a miembros de Wau y los Arrrghs!, Midnight Shots o Los Tracahombres disfrutando del concierto entre las primeras filas.


Las canciones que nos llevaron al borde de colapso víctimas del furibundo baile fueron:


1. Rambling Rose


2. Bip Bop Bip


3. It’s Mighty Crazy


4. Just Moved In


5. Georgia Slop


6. You told a lie


7. Willie Meehan


8. Cotton Pickin’


9. Bloody Mary


10. Big Mamou


11. Bad Girl


12. Who’s Gonna Rock My Baby?


13. Walk Out


14. Geronimo’s Rock


15. Go Ahead & Burn


16. Mop Mop


17. Ship Sails at Six


18. Walking with Barrence


(BIS)


- Savage Sax


- Mama Get the Hammer


- Mammer Jammer


- Dig Yourself


- Running Shoes


- Miss Shake It


- Rocking in the Coconut Top


Reseñar que en esta ocasión le tocó caldear la noche a la banda valenciana Electric Cavin, viejos conocidos de la afición que, con la que parece su formación definitiva, convidó a los presentes a una degustación de esa mezcla de Rock de la Costa Oeste y Soul depurado en la que tan bien se manejan. Su set lo centraron en canciones de otros, desde los Box Tops a Steve Winwood pasando por Gladys Knight & The Pips, Tony Joe White o Creedance Clearwater Revival, debidamente salpicado de composiciones propias.


Yo ya te lo dije

lunes, 19 de septiembre de 2011

Un grupo que no hay que perderse...

Para los que andéis por el Foro el próximo fin de semana, seguramente os interesará saber que:

EL PRÓXIMO VIERNES 23 DE SEPTIEMBRE A LAS 19H. EN EL FORUM DE FNAC CASTELLANA,

ZOMBIE VALENTINES PRESENTARÁN SU ÁLBUM "MEJOR AHORA".

LA ENTRADA ES LIBRE Y EL AFORO LIMITADO ASÍ QUE NO OS DESPISTÉIS Y SED PUNTUALES A LA CITA. ¡¡HAY QUE EMPEZAR CON BUEN PIE EL FIN DE SEMANA!!

¡¡OS ESPERAMOS!!

Fnac Castellana: Po. de la Castellana, 79. Metro Nuevos Ministerios. Madrid.

ZOMBIE VALENTINES

Yo ya te lo dije

viernes, 16 de septiembre de 2011

Pajaritos y pajarracos...



Yo ya te lo dije

viernes, 9 de septiembre de 2011

Euro Ye-Yé 2011

Cómo hemos disfrutado en esta, la decimoséptima, edición del sensacional evento gijonés auspiciado, nuevamente, por los incansables dandies de Trouble & Tea y The New Untouchables.

Como sabéis, el Euro Ye-Yé es un festival exquisito y con una programación absolutamente excelsa. No es un Festival al uso en el que se programan tropecientos mil grupos y que no deja tiempo ni para detenerte a degustar la cena, pues en caso contrario te pierdes la actuación de X, que, por otro lado, te va a hacer perderte la de Y. No, aquí no se actúa en esos términos. Una o dos artistas por noche y después una selección de los mejores pinchadiscos europeos de la escena Mod y Sixtie. Y punto.
La primera áctuación del Ye-Yé corrió a cargo del grupo liderado por Nasser Bouzida, The Bongolian, que venía a Gijón a presentar su flamante "Bongos for Beatnicks" (Blow Up Records). Les costó a los británicos sortear ese momento en el que el público está todavía más pendiente de la primera cerveza y de los saludos de rigor, sin embargo, el grupo se fue sintiendo más y más a gusto por momentos para terminar su set con la gente totalmente entregada a su propuesta, funk, soul, boogaloo, sintetizadores y un ritmo endiablado y elegante a partes iguales. De todos modos, y esto es ya una apreciación personal, me gusta más cuando se enfunda la camiseta de The Big Boss Man. Sea como sea, un gran arranque del Ye-Yé.

A continuación, era el momento de desprecintar la Sala Oasis y el primero de los grupos en subirse al escenario de la misma era July, leyenda de culto, especialmente entre los seguidores de la Psicodelia y autores del codiciado "July". El grupo, tras un periodo de silencio de décadas que a nadie le hacía imaginar un regreso, he vuelto a reunirse para asaltar los escenarios y publicar material nuevo, material que, por lo escuchado en Gijón tiene bastante buena pinta. Sobre su actuación decir que solemos atacar con mucha cautela el regreso de las bandas originales de los sesenta, algunas experiencias nos hacen ir con el pie echado en estos Comebacks, sin embargo, en este caso, la compenetración y el inmejorable estado de forma que mostraron los miembros de July sobre el escenario nos sorprendieron gratísimamente. Su actuación basculó entre piezas de los sesenta y las que compondrán su álbum de regreso.

La segunda jornada incluía en el cartel a la gran diva Maxine Brown, su inclusión en el Ye-Yé fue motivo más que suficiente para que mucha gente no se pensara el hecho de doblar el mapa y embarcarse rumbo a ese paraiso natural que es Asturias. La norteamericana tuvo como grupo de acompañamiento a The Pepper Pots (que, por cierto están viviendo su verano de gloria). Los gerundenses abrieron la velada con su set. Han dejado artrás definitivamente los devaneos con el "early rggae" para abrazar definitivamente los parámetros definidos por la Motown. Se les vio ilusionadísimos con la que iba a ser una de sus grandes noches, ilusión que supieron transmitir al públicó que disfrutó mucho bailando los temas que fueron desgranando los catalanes, con especial presencia de canciones de su último lp, el destacable "Train to your lover". Tocaba cambiarse de ropa y volver al escenario para acompañar a la Gran Dama. Y allí estaba, era cierto, Maxine Brown delante de nuestros impávidos rostros. Vestida de rojo riguroso y dirigiendo a la banda con una soltura y un desparpajo encantador Maxine Brown nos brindó un recital que no creó que vayamos a olvidar ninguno de los que estuvimos presentes en la Sala Oasis el pasado viernes 5 de agosto. Desde que empezaron los primeros compases de "One in a million" (¡Vaya inicio!), nos dimos cuenta de que la cosa iba en serio y que allí iba a pasar algo gordo. Maxine se fue reivindicando como lo que es, una de las grandes divas del Soul de todos los tiempos y lo hizo con una elegancia y una proximidad al alcance de muy pocos. Eligió un repertorio rotundo, con paradas en éxitos ajenos como "Take a little piece of my heart" o "Hold on, I'm coming" y propios como "All in my mind", "Since I found you" o "One in a million". Maxine conserva una voz, una presencia y una pasión por la música que hicieron que el público terminase su actuación pidiendo, rogando que no se marchase, que se quedase un poquito más... Yo vi incluso derramar alguna lagrimita, normal.

El sábado nos tenía preparada la actuación de The Faith Keepers y The Higher State. Abrieron la noche los británicos The Higher State quienes tuvieron a bien en su primera visita por estas latitudes demostrarnos su devoción por The Byrds. El grupo también bucea entre las aguas del Garage y la Psicodelia y a sus logradísimas melodías hay que añadirle un estupendo dominio vocal. De lo mejor de la escena Sixties europea actual.
A continuación el funk, el soul y los ritmos latinos inundaron la Sala Oasis de la mano de The Faith Keepers, grupo zaragozano que se empeñó en hacernos desgastar más aun las suelas de nuestros ya de por sí maltrechos mocasines. Presentaron su disco homónimo ("The Faith Keepers" -Lontano Records-) al completo y transmitieron una energía y el groovie propio de las grandes ocasiones. Borja, el enchufadísimo lider del combo (¡Eres blanco y tú no lo sabes!) no da tregua, desde que pisa las tablas hasta que las abandona enfundado en su empapada toalla nos transporta a todos por un viaje a los ritmos afroamericanos más asilvestrados, con parada y fonda en Fania, el Bronx y Joe Tex. Rotundos.
Ya sólo quedaba un grupo, unas horas para que ese fantástico viaje que supone el Euro Ye-Yé finalizase y nos dieramos de nuevo de bruces con la jodida realidad. El último grupo de subir al escenario fue King Khan & The Shrines quienes nos descargaron un torrencial de Garage salpicado por el buen humor (a los portugueses no sé si les haría tanta gracia) de King Khan quien enfundó su orondo cuerpo en su clásica capa y guió a los suyos por las sendas de los sonidos más gamberros y desmadrados de los sesenta, con un final apoteósico digno de las grandes ocasiones, de esos que parece que ya no hay vuelta atrás (aunque, siempre suele haberla).

Si los conciertos estuvieron a la altura de tan magno evento, los Allnighters no les fueron a la zaga. Las tres pistas te retenían con sus sonidos, a saber, blanco, negro y Northern Soul. Era dificil elegir qué era lo que preferías bailar. El nivel era muy alto. Nosotros nos decantamos algo más hacia los sonidos negros y jamaicanos, aunque el freakbeat o el blue eyed soul también nos hicieron sudar. Siendo dificil destacar algún dj por encima de otro, decir que nos cautivaron especialmente las sesiones de Rob Bailey, Damien, Felix y Sergio, pero en especial las de Callum Simpson y el pope del Ska y el Rocksteay, Jim Cox.

El resto de actividades incluían proyecciones cinematográficas (con "Bande à part", "The party is over", "Aoom" y los documentales "Nobody knows that we're here" y "Dan Delion" en el cartel), exposiciones (con interesantes obras de Ringo Julian y Lord Dunsby) y presentaciones (del libro "De derrotas y victorias" de Daniel Bernabé y la web Real Mod World de Dani Llabrés). Además, tuvo lugar el clásico Rally de Vespas y Lambrettas, ese desfile de preciosísimas scooters que supone ya un clásico del primer fin de semana de agosto.

Fueron unos días sensacionales. Si lo calificara de Notable alto, la organización podría decir que el profe les tiene ojeriza, así que seré magnánimo. Matrícula de Honor y nos vemos en 2012.


Yo ya te lo dije